Hipotecas a plazo variable

Hipotecas a plazo variable

Se trata de un tipo de hipoteca cuyos pagos varían en función de lo que haga el Euríbor (u otro índice). Si el índice de referencia baja, la cuota también lo hará. Por lo contrario, los costos aumentarán si el Euríbor hace lo mismo. Se trata, por tanto, de un producto financiero de mayor riesgo que una hipoteca fija donde el importe es siempre el mismo. Sin embargo, este es un préstamo en el que puedes pagar menos si la situación es propicia. Por este motivo, la recomendación es que consigas un buen asesoramiento hipotecario.

Un punto a favor de a hipoteca variable es que muchos bancos ofrecen ciertos descuentos y reducciones de tarifas a los clientes que se decantan por hipotecas a tipo de interés variable. Otra característica es que el primer año suele fijarse un tipo de interés más elevado que el que tendrá los demás años.

La cuota mensual de la hipoteca variable se compone, entonces, de dos partes: La parte variable que dependerá del índice de referencia y la fija que acuerda el cliente con la entidad financiera en el momento de la contratación.

En consecuencia, durante la vida de la hipoteca las cuotas van cambiando una o dos veces al año, dependiendo del periodo de revisión que se pacte con el banco- puede ser semestral o anual-. Solamente al final de los años que dure tu hipoteca podrás saber si tu decisión fue acertada al contratar el tipo variable en lugar de la de tipo fijo.