Teléfono fijo

Teléfono fijo

El teléfono fijo es lo que se usaba para llamar antes de la llegada del teléfono móvil. Se llama así porque está conectado a un cable que transmite el sonido hacia una central y de allí hacia el otro teléfono al que estás llamando. Debido a que necesita el cable para funcionar, no es posible transportarlo a ningún otro sitio. En la actualidad, la única parte del teléfono fijo conectada al cable es una base, por lo que el teléfono propiamente dicho sí que puede transportarse dentro de la vivienda.

Cuando internet surgió, era indispensable tener un teléfono fijo para poder conectarse y al principio no era posible utilizar el teléfono y el internet al mismo tiempo. Con los avances tecnológicos esto ha cambiado y ya es posible tener internet sin un teléfono fijo. Entre esto y la popularización de los móviles, la demanda de telefonía fija ha disminuido mucho. En la actualidad casi no tienen presencia en los hogares y su uso se ve sobre todo en oficinas. 

Teléfono fijo vs móvil

La principal diferencia es que un teléfono fijo solo puede hacer llamadas y recibir mensajes de voz. En cambio, los teléfonos móviles cada vez son capaces de más cosas, mensajes de texto, llamadas de video, conexión a internet, etc. 

Entre las ventajas de un teléfono fijo está que las tarifas de llamadas entre dos teléfonos fijos son más económicas que para llamadas entre teléfonos móviles. También cabe destacar que el servicio es más estable en teléfono fijos, ya que no dependen de la cobertura.

Por otro lado, el teléfono móvil tiene muchos más usos y permite estar conectado en todo momento y no solo en casa o la oficina.

La factura del teléfono

El uso de un teléfono fijo se cobra por minutos de llamada. Hay planes que tienen cierta cantidad de minutos al mes y planes con llamadas ilimitadas, dependiendo de la empresa. También cabe destacar que las tarifas varían de acuerdo a si es una llamada a un teléfono fijo o móvil, y si es una llamada local o internacional. Generalmente las llamadas a teléfonos fijos y locales son más económicas que las llamadas a móviles e internacionales.

En la factura es común que aparezca la tarifa base por el plan contratado y que los servicios como las llamadas internacionales aparezcan como un cargo adicional. En la factura también verás impuestos como el IVA.